Observaciones a las declaraciones del Secreatario de Educación Pública, Emilio Chuayffet Chemor, sobre revertir la NO REPROBACIÓN en primaria, del día 22 de febrero de 2013, en:
Comentario de Juan Carlos Palafox Pérez de Salazar:
Complicado este asunto. La NO
REPETICIÓN en los primeros grados de la educación primaria tiene varios
aspectos que conviene analizar antes de tomar una determinación apresurada, tal
cual fue su instrumentación en la administración pasada, dentro de los cuales
podemos mencionar los siguientes:
1. Existen experiencias más que
exitosas de la NO REPETICIÓN en primaria como es el caso de Japón, Corea del
Sur o Noruega, países claramente desarrollados o de países donde es menor al 3%
como Islandia, Eslovenia, Taiwán, Montenegro, Reino Unido o Finlandia, misma que
corresponde a los grados superiores y no a los tres primeros, o como Cuba en el
entorno latinoamericano, con mucho el país con el mejor nivel educativo de todo
el hemisferio occidental.
2. Ahora bien, esto no es
gratuito, no solo por el hecho simple de eliminar la repetición, sino que
responde a fundamentos pedagógicos y hasta biológicos duros, definidos en la
teoría constructivista del conocimiento, por lo que merece una reflexión más
seria y profunda del tema.
3. Lamentablemente esta
estrategia educativa fue instrumentada en nuestro país como muchas otras cosas,
copiando "en automático" y parcialmente, lo que se hace en otras
latitudes a recomendación de Organismos Internacionales que no son
especialistas en educación.
4. La NO REPETICIÓN, en síntesis,
es el reconocimiento de que en general todos los niños son capaces de aprender
todo (con muy contadas excepciones), pero igualmente, que no todos los niños
son iguales y sus procesos de construcción de su conocimiento no se da al mismo
ritmo y ni a la misma velocidad, lo cual no se resuelve haciendo repetir el año
a los niños, sino dando tiempo a que dicho proceso de aprendizaje se dé durante
un lapso más amplio.
5. Adicionalmente, el proceso de
la NO REPETICIÓN, debe complementase (lo cual no se hizo en el caso mexicano),
por varias medidas que de no existir, entonces la NO REPETICIÓN es
contraproducente. Tales medidas, entre otras, podemos mencionar estas: a. El
acompañamiento de los alumnos durante esos tres primeros años o grados por el
mismo maestro, lo cual permite al docente interiorizarse profundamente de las
características físicas, educativas, emocionales, psicológicas, sociales,
familiares, etc. de cada uno de sus 20 o 30 alumnos, lo que les permite adecuar
sus estrategias psico-sociales, didácticas y pedagógicas a cada uno de sus
alumnos, devolviendo a los docentes el antiguo rol de tutor de sus alumnos y
verdaderos constructores de personas; b. Apoyo especializado para los alumnos
que los docentes detecten en ese periodo como atípicos, ya sea que presenten
problemas como puede ser de audición, de visión, de conducta, familiares, de
pobreza, etc., con el objeto de atender dichas atipicidades oportunamente,
nivelarles o canalizarlos a tiempo para su atención más especializada en caso
de así requerirse; c. Fortalecimiento de las competencias psico-sociales de los
docentes para la detección y manejo inicial de conflictos de ese orden en sus
alumnos y en su entorno familiar, resaltando con ello el papel de tutor antes
mencionado y resarciendo el valor social de su función, tan deteriorado a
últimas fechas en nuestro país.
6. Complementariamente, el
acompañamiento por ciclo de los docentes con sus alumnos, termina con la
nefasta costumbre en nuestro medio (no justificada ni sustentada por ningún
instrumento normativo) de fomentar los maestros especialista de grado, como si la
preparación profesional y el título que les acreditan como docentes indicara “Maestro
de educación básica de “X” grado”, costumbre que contradice el más elemental
sentido común, que nos indica que como en todas las demás actividades humanas, los
más aptos se canalizan a enfrentar los problemas más complejos, lo cual en la
actualidad no sucede en educación, donde es costumbre que los docentes más
experimentados se hacen cargo de sexto grado, el cual presenta menos dificultad
que los primeros grados, donde generalmente son asignados los maestros de nuevo
ingreso, los recién egresados, sin experiencia. No se trata entonces de “cargarle”
la mano a unos o a otros, sino de distribuir las fortalezas o debilidades
docentes homogéneamente en todos los grados y no direccionar las debilidades a
los niños más pequeños y las fortalezas a los mayores.
7. La NO REPETICIÓN en los términos
antes expuestos, y solo así, tiende a fortalecer el compromiso de los docentes
por sus educandos; ayuda a la re-significación y re-valorización social de la
profesión docente; reduce los sentimientos de culpa y fracaso de los alumnos; reduce
los costos de la educación; y finalmente, coadyuva a elevar los niveles de
calidad educativa
En fin, que si la medida de la NO
REPETICIÓN se hubiera hecho a partir de las recomendaciones de los entendidos
en educación y no de los entendidos en Desarrollo Económico como se hizo en México,
“otro gallo nos cantaría”.
Considero que volver a la
repetición y no optar por ajustar, afinar y mejorar el modelo de la NO
REPETICIÓN, para llevarlo a un modelo racional desde el punto pedagógico,
corrigiendo su torpe instrumentación por decreto, es un terrible error, es
optar por una decisión igual o peor que la anterior. La repetición está probado
que fomenta el fracaso escolar, incrementa costos, genera frustración en los
niños e incrementa deserción del sistema y por ende el rezago educativo, tan elevado
en nuestro país (más de 30 millones de mexicanos y mexicanas mayores de 15 años
que no han concluido su educación básica).
Me parecen muy interesantes sus reflexiones, estoy de acuerdo en que la reprobación produce frustración en los niños, las recomendaciones que menciona en relación al acompañamiento a de un mismo maestros en los primeros grados sería una de las soluciones pedagógicas, porque aunque se utilicen instrumentos para registrar los avances y necesidades de los alumnos, es necesario un seguimiento puntual. Pero tambien los maestros deben recibir acompañamiento para que el que den a los alumnos sea el pertinente, porque escuchamos preocupaciones tribiales como qué pasará con la organización del festejo social la clausura de sexto grado, o incluso se escuchan ideas para concencer al padre de familia de que su hijo de 1o ó 2o debe reprobar. Al hacer la relfexión de las implicaciones de la reprobación los maestros cambian su enfoque.
ResponderEliminarGracias estimada Maestra bettyVM agradezco a usted su acuerdo con lo expresado en este texto sobre la NO REPROBACIÓN y en cuanto a su sugerencia relativa a que "los maestros deben recibir acompañamiento para que el que den a los alumnos sea el pertinente", solo me permito respetuosamente hacer incapié en que a eso me refiero cuando menciono en el punto 5, acápite "c. Fortalecimiento de las competencias psico-sociales de los docentes para la detección y manejo inicial de conflictos de ese orden en sus alumnos y en su entorno familiar, resaltando con ello el papel de tutor antes mencionado y resarciendo el valor social de su función, tan deteriorado a últimas fechas en nuestro país." Es necesario como usted bien dice dar seguimiento a los docentes y procurarles de ciertas competencias que les permitan manejar eficazmente las exigencias que el nuevo rol de tutores les exige. Sin más por ahora, nuevamente agradezco a usted sus puntos de vista y preocupación por lo educativo.
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